Por: Eva Varona
3 julio 2018
Fueron varios los momentos clave que
impulsaron la transformación de los medios de comunicación en el estado,
empujándolos hacia una evolución de la era digital.
Por supuesto el uso de las herramientas digitales en las
empresas de comunicación se dio como una evolución natural ante los avances
tecnológicos, pero hubo momentos clave en Veracruz que aceleraron este proceso
a tal grado de que ahora existe una sobresaturación de medios de comunicación
en internet y redes sociales sobre todo Facebook.
Fue TWITTER la red social que
lo cambió todo; hablamos anteriormente del pasado twittero de Veracruz en la
segunda parte, la participación de esta herramienta para los periodistas se
volvió fundamental en el sexenio Fidelista y Duartista entre los años 2004
-2016.
Sin embargo con Twitter es importante
acotar que dicha metamorfosis se da de la mano con los espectadores; la
sociedad se inclinaba cada vez más al consumo de información de manera masiva y
rápida, así es como vemos también, sociedad y medios de comunicación en una
sinergia en esta transformación.
Es por ello que percibimos a una sociedad
mayor informada; incluso con deseos propios de comunicar. Y es en esta etapa
que comienza a manifestarse con mucha fuerza el llamado “periodismo ciudadano”
que se exteriorizó en Veracruz, dicho fenómeno obligó al periodista tradicional
a incursionar, explorar y utilizar las herramientas digitales.
Innovarse o morir…
Fue entonces cuando nos enfrentamos a una
realidad inherente: ¡todos podemos informar! llega la era de los PROSUMERS.
La palabra PROSUMER o PROSUMIDOR es
un acrónimo formado por la fusión original de las palabras en ingles PRODUCER
(productor) y CONSUMER (consumidor).
Así que el gremio periodístico Veracruzano
y mundial, estábamos ante el fenómeno más grande de transformación mediática:
el que consume información ahora es también el que produce seas o no
“profesional”.
El público pasó de procesar información que
recibe y dejar el rol pasivo, para generar sus propios contenidos editoriales;
y ante esto cabe preguntar:
¿Por qué producir tus propios contenidos
informativos?
¿Qué había de malo con los medios ya
existentes?
La respuesta fue contundente; no es el
medio de comunicación, es la información que se genera y es quien genera esa
información que durante esta etapa en Veracruz, era evidentemente manipulada.
Y así entramos a otra causa que motivó la
transformación mediática en el estado: pues sino eran los medios, eran los
periodistas o generadores de contenido informativo; entramos en una evidente
carencia de credibilidad.
*LA CRISIS DE LA CREDIBILIDAD
Dicha carencia afectó enormemente la labor
periodística en Veracruz; el periodista vive de la credibilidad de su
información y aquí marcamos otro factor que originó el cambio.
El sentimiento fue generalizado; ya en el
bienio Yunista, cuando se dieron a conocer las listas de comunicadores,
periodistas y empresas informativas que fueron favorecidos durante los mandatos
priístas, con ello se reveló también la evidente manipulación de la información,
ocultando datos de vital importancia para la sociedad.
Aquellos personajes que se encumbraron
dentro de una profesión que se supone trabaja por el bien común al informar con
veracidad, se pusieron en evidencia; mentían y peor aún manipulaban los datos
para quedar bien no con el pueblo sino con el financiador de su “empresa
periodística”.
Y es aquí que el periodismo veracruzano
entra en una etapa oscura; no existe peor castigo para quien vive de la
credibilidad que perderla y además ser sustituida por el desprestigio.
¿Cuántos periodistas de larga trayectoria
se “vendieron” y con ello catapultaron su credibilidad?
A todo esto que pasaba en Veracruz, debemos
agregarle el sentimiento nacional del famoso “encabronamiento”.
El 22 de mayo del 2016 salió publicado en
el periódico Reforma el semáforo que mide el estado de ánimo del humor social.
El humor social es un concepto que fue
creado por la agencia de investigación NODO, dirigida por Luis Woldenberg que
durante 20 años se ha dedicado a construir un aparato metodológico para medir y
entender el humor social a través de ciertas categorías.
La herramienta del humor social es una
métrica con fundamentos estadísticos psicológicos y sociológicos capaz de
revelar el estado de ánimo que predomina en la sociedad.
Así que entendemos que el malestar
generalizado en realidad es una acumulado de acontecimientos en ciertas fechas.
El periodo del 1988 a 1993 es la clave de
la estrepitosa caída de la moral nacional.
Sin embargo se pudo caer más; y fue la
crisis del 2008-2016 con la llegada de la lucha contra el narco y el incremento
de precios en gasolina y canasta básica, desempleo etc, que se tuvo que ampliar
la escala del humor que reflejaba una realidad al borde de la depresión; ¡17
categorías más abajo!
Hartazgo, frustración, tensión, descrédito
y mucho pero mucho “ENCABRONAMIENTO” por
parte de la sociedad.
Así que a los veracruzanos les tocó doble “encabronamiento”
que agregó una alta dosis de incredulidad a los medios y los periodistas que
informaban que “Vamos para adelante y viene lo mejor” (según el slogan
Duartista) distinta a la realidad que se vivía.
*JUSTOS POR PECADORES
Junto al nuevo bienio (2016-2018); se
esperaba un “refrescante” ascenso en ese encabronamiento; sin embargo fue
precisamente aquí donde el gremio periodístico entró en una fase de
supervivencia.
El nuevo mandato trajo consigo el despido
masivo de reporteros, periodistas y/o
profesionales de la información; todo justificado por dos razones según el
nuevo Gobernador Miguel Ángel Yunes Linares:
La primera: la crisis económica provocada
por el desfalco Duartista, desvíos millonarios que quebraron las arcas del
estado, mismo que obligó a prescindir de lo que él consideraba un lujo, es
decir; LA PRENSA.
La segunda: La relación con la prensa y el Gob.
Yunes Linares nunca ha sido del todo “amigable” y pagando justos por pecadores,
ordenó que el departamento de comunicación social fuera deducido al mínimo y
que “no existirían convenidos con ningún medios de comunicación” .
Y como su campaña tuvo fuerte presencia en
redes sociales, sobre todo en FACEBOOK; decidió que esa plataforma fungiría
como su “vocera oficial”.
Además también ordenó el cierre de todas
las oficinas de difusión o apoyo de difusión en cada dependencia, oficina,
instalación artística y cultural de gobierno:
“El gobernador nos dijo que no había dinero
para difusión en prensa, que nosotros (directivos) mismos agarremos nuestros
teléfonos celulares y publiquemos en Facebook nuestro trabajo”
Me comentó sorprendido un amigo que tiene a
su cargo una dependencia cultural.
Cientos de reporteros y/o periodistas
quedaron en la orfandad, sin empleo. A este fenómeno también se unió el recién
nombrado alcalde de Xalapa Hipólito Rodríguez que dentro de una segunda oleada
de despidos, se fueron no solo colegas de la prensa.
Estas medidas colocaron en una severa
crisis existencial al periodismo veracruzano, pero afortunadamente no duraría
mucho.
CONTINUARÁ…
Eva Varona
@lavaronita
CUARTA PARTE:
*Nace la era del periodismo digital en
Veracruz.
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