23 Agosto 2007
Eva E. Varona Conde
EL PODER DE DECIR NO
Fíjense que me he topado con un maravilloso reportaje del periódico Excelsior, cuyo contenido realmente llamó mucho mi atención.
Se trata del “poder” (en aspecto de dominio) de la palabra NO.
Y entonces me cae como balde de agua fría darme cuenta cómo una simple palabra muchas veces llega a dominar nuestras vidas por completo y hasta transformarla.
El “no” es en realidad una palabra igual que todas las demás en el mundo, pero al compararla con “si” adquieren aspectos muy curiosos en nuestra vida.
Por ejemplo:
Cuando se nos ofrece algo, cualquier cosa, pero “no” tenemos ganas de ello…la mayoría de las veces contestamos con un…gracias, a lo mejor después, tal vez más adelante, muy agradecido (a) etc.
Mucho se alude al hecho de que se prefiere contestar de forma amable o cortés, que decir un NO que “sonaría” más despectivo.
¿No es acaso, algo mas cortes decir simplemente que NO se desea tal cosa, que sencillamente dar FALSAS esperanzas a algo que aunque NO se quiere?
Pero según se cree, todo tiene que ver con nuestra cultura y como confundimos una respuesta negativa o un NO con sentirnos desprotegidos.
Por supuesto todo sería mucho más fácil de lo que se imaginan si aprendemos a decir no.
Comenzando porque las mujeres y no generalizo, pero si en su mayoría, decir un NO es como aceptar que estamos derrotadas o somos rechazadas y nos sentimos indefensas.
Y aquí algunos ejemplos:
En vez de decir:
“NO quiero andar contigo porque no te amo”
Decimos:
“La verdad es que no me agradaría andar con alguien como tu porque no siento nada hacia ti”
Pregunto:
¿Cuál de las dos le está dando esperanzas?
Y aunque en verdad no andaríamos con alguien así, la segunda respuesta lejos de parecerse diplomática o menos dolorosa es la misma respuesta.
Porque no simple mente decir NO.
“no voy a contratarte”, “no quiero pastel”, no, no ,no
Es simplemente decir que NO
Al igual que un SI.
Pero cómo cambia el sentido de las cosas cuando decimos por ejemplo:
“no quiero hijos”
En primera si quien lo dijo si es mujer, seguramente es “una madre desnaturalizada” y si es hombre, jejeje es un mentiroso porque ya ha detener más de dos por ahí jejejeje, no es cierto, el sentido cobra dimensiones distintas porque en nuestra cultura nos enseñaron que los hombre en primer lugar NO DEBEN LLORAR, así que en respuesta a algún hombre que diga eso…simplemente se le respeta esa opinión, y lo tomamos como opinión y no como una negativa como debería serlo para quien fuera que lo haya dicho.
Se dice que también el no, es una actitud cobarde…y que razón tienen.
Cuantas mujeres se habrían salvado de ser heridas emocional y físicamente si hubieran dicho simplemente NO.
“NO TENDRE UNA RELACIÓN DEPRIMENTE”
¿Suena fuerte verdad?
Y eso…qué creen…todos lo podemos decir, pero NO todos lo podemos llevar a cabo realmente.
Con todo esto me pongo a reflexionar los NO que han existido en mi vida y las cosas o situaciones deprimentes que me hubiera ahorrado al saber decir a tiempo que NO.
Decir un NO rotundamente No nos convertirá en malas personas, solo personas más seguras y por supuesto más decididas.
Leía que las cosas más difíciles de decir en el mundo que son:
Te amo
Perdóname
Ayúdame
A esta lista deberíamos agregarle el NO
¿Cuántas de estas palabras las has dicho con sinceridad?
Reflexiona y NO te engañes.
e_varona@hotmail.com
lavaronita@hotmail.com
www.lagazetanitro.com
www.frecuenciareal.com
www.lagazetanitro.com
www.noticieroveracruz.com
Eva E. Varona Conde
EL PODER DE DECIR NO
Fíjense que me he topado con un maravilloso reportaje del periódico Excelsior, cuyo contenido realmente llamó mucho mi atención.
Se trata del “poder” (en aspecto de dominio) de la palabra NO.
Y entonces me cae como balde de agua fría darme cuenta cómo una simple palabra muchas veces llega a dominar nuestras vidas por completo y hasta transformarla.
El “no” es en realidad una palabra igual que todas las demás en el mundo, pero al compararla con “si” adquieren aspectos muy curiosos en nuestra vida.
Por ejemplo:
Cuando se nos ofrece algo, cualquier cosa, pero “no” tenemos ganas de ello…la mayoría de las veces contestamos con un…gracias, a lo mejor después, tal vez más adelante, muy agradecido (a) etc.
Mucho se alude al hecho de que se prefiere contestar de forma amable o cortés, que decir un NO que “sonaría” más despectivo.
¿No es acaso, algo mas cortes decir simplemente que NO se desea tal cosa, que sencillamente dar FALSAS esperanzas a algo que aunque NO se quiere?
Pero según se cree, todo tiene que ver con nuestra cultura y como confundimos una respuesta negativa o un NO con sentirnos desprotegidos.
Por supuesto todo sería mucho más fácil de lo que se imaginan si aprendemos a decir no.
Comenzando porque las mujeres y no generalizo, pero si en su mayoría, decir un NO es como aceptar que estamos derrotadas o somos rechazadas y nos sentimos indefensas.
Y aquí algunos ejemplos:
En vez de decir:
“NO quiero andar contigo porque no te amo”
Decimos:
“La verdad es que no me agradaría andar con alguien como tu porque no siento nada hacia ti”
Pregunto:
¿Cuál de las dos le está dando esperanzas?
Y aunque en verdad no andaríamos con alguien así, la segunda respuesta lejos de parecerse diplomática o menos dolorosa es la misma respuesta.
Porque no simple mente decir NO.
“no voy a contratarte”, “no quiero pastel”, no, no ,no
Es simplemente decir que NO
Al igual que un SI.
Pero cómo cambia el sentido de las cosas cuando decimos por ejemplo:
“no quiero hijos”
En primera si quien lo dijo si es mujer, seguramente es “una madre desnaturalizada” y si es hombre, jejeje es un mentiroso porque ya ha detener más de dos por ahí jejejeje, no es cierto, el sentido cobra dimensiones distintas porque en nuestra cultura nos enseñaron que los hombre en primer lugar NO DEBEN LLORAR, así que en respuesta a algún hombre que diga eso…simplemente se le respeta esa opinión, y lo tomamos como opinión y no como una negativa como debería serlo para quien fuera que lo haya dicho.
Se dice que también el no, es una actitud cobarde…y que razón tienen.
Cuantas mujeres se habrían salvado de ser heridas emocional y físicamente si hubieran dicho simplemente NO.
“NO TENDRE UNA RELACIÓN DEPRIMENTE”
¿Suena fuerte verdad?
Y eso…qué creen…todos lo podemos decir, pero NO todos lo podemos llevar a cabo realmente.
Con todo esto me pongo a reflexionar los NO que han existido en mi vida y las cosas o situaciones deprimentes que me hubiera ahorrado al saber decir a tiempo que NO.
Decir un NO rotundamente No nos convertirá en malas personas, solo personas más seguras y por supuesto más decididas.
Leía que las cosas más difíciles de decir en el mundo que son:
Te amo
Perdóname
Ayúdame
A esta lista deberíamos agregarle el NO
¿Cuántas de estas palabras las has dicho con sinceridad?
Reflexiona y NO te engañes.
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